Podrido Podrido

En el futuro observaremos todo lo sucedido alrededor del Caso Gürtel con incredulidad, como ya sucede con todo lo que rodeó al 11-M.

La derecha española sigue deslizándose hacia los infiernos, dejándose arrastrar por una pandilla de indeseables, socavando en este viaje alucinante las posibilidades de una alternativa de Gobierno y dilapidando el necesario debate acerca de asuntos tan importantes como, por ejemplo, cómo debemos afrontar la actual situación económica.

Cascos y Cospedal recuperan el discurso del pasado verano y ponen en tela de juicio a todas las instituciones con tal de salvar el pellejo de una banda de chorizos. Las teorías conspirativas atacan de nuevo.

Finalmente, cada vez más ciudadanos piensan que las siglas PP sólo pueden significar una cosa: Podrido Podrido.