Zapatero acierta

La reforma del Ejecutivo que Zapatero anunció ayer (y que algunos medios de comunicación adelantaron el pasado fin de semana) era más que necesaria. La sensación de agotamiento, o de cierto desánimo, que transmitían algunos ministros no era precisamente la imagen más adecuada para estos tiempos de crisis.

Zapatero mata varios pájaros de un tiro: renueva su Gobierno para afrontar una etapa dura, dota de mayor perfil político al Ejecutivo, se rodea de ministros del Partido capaces de responder a la oposición con argumentos sólidos, renueva el Gobierno andaluz dando una salida de alcance a Chávez, premia a algunos de sus más leales seguidores (Trinidad Jiménez y Blanco)...

El mayor acierto es, sin lugar a dudas, el haber incrementado notablemente el perfil político de sus ministros. Zapatero afrontaba casi a solas la tarea de gobernar, de comunicar y de responder a la oposición. El desgaste era evidente, y los resultados de dicha labor cada vez menos satisfactorios. Ahora se sentirá más respaldado.

Si algún pero hay que poner es que no haya reducido las carteras, integrando Vivienda en Fomento e Igualdad en Sanidad y Políticas Sociales. Ambos ministerios apenas tienen repercusión, tampoco están reportando frutos y sí que generan importantes gastos.